Esta es mi primera incursión en el mundo del grabado. En esta ocasión nos reunimos para aprender a grabar con la gubia una pequeñísima pieza de linóleo. No fue fácil. Hay que tomarle la forma y la inclinación a la herramienta para poder controlar el trazo. Sin embargo, me gustó mucho el resultado. Hice unas cuantas pruebas en papel. Además probé también a tallar una goma de borrar y con ella hice unas pruebas en un retazo de lino.